Creando ministerios no se resuelve la situación penitenciaria en el país
Los hechos ocurridos en los centros penitenciarios Rodeo I y II, ponen en evidencia la situación de las cárceles en Venezuela; condiciones crueles e inhumanas, acompañadas de violencia, es un mal de todos los días.
Durante varios días se mantuvieron enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los presos, el desarme de grupos armados en las cárceles era una de las razones para que el Gobierno tomara esta decisión; que ha costado un considerable saldo de personas fallecidas.
Las explosiones de violencia en las cárceles venezolanas obedece a las horribles condiciones en que viven estas personas, el hacinamiento al que son sometidos, aunado al retraso en sus procesos, ha incidido en esta ola de violencia desatada en la cual el Ejecutivo Nacional ha querido tapar, pero las evidencias son claras y donde un ministro ha quedado mal parado por su ineficiencia en el cargo, Tareck El Aissami, ministro del Poder Popular de Relaciones y Justicia.
¿Ministerios para qué?
Tarek El Aissami, ministro de Relaciones y Justicia |
Por allá en 1999, Hugo Chávez Frías en uno de sus primeros anuncios como Presidente de la República, se mostraba escandalizado por la cantidad de ministerios (16) que tenía su antecesor en el cargo. Por lo cual fusionó algunos ministerios y eliminó otros, señalando que con nueve o diez se podría gobernar.
Doce años después esa “promesa” quedó en el vacío, hoy la revolución bonita cuenta con 30 ministerios.
Con el Ministerio para la Atención Integral Penitenciara – quien aún no se ha designado a su encargado -, el Gobierno pretende enfrentar la situación de las cárceles venezolanas, obviando las funciones del Ministerio del Poder Popular de Relaciones y Justicia, quien tiene competencia en esta situación.
Qué consecuencias puede traer un nuevo gabinete al Gobierno, en lo personal ninguna ya que se creará otro sistema burocrático e ineficiente que no aportará soluciones. Parece que se premia a los aduladores que proponen soluciones con un ministerio.
En otros gobiernos quedaba claro que si un ministro no cumplía con sus funciones, el Presidente lo destituía de su cargo; pero acá la ineficiencia de El Aissami ha quedado evidenciada ante todo el mundo, cual es el premio por su fracaso. Crear un nuevo gabinete para que atienda los problemas carcelarios.
Ministerios para tapar los problemas
De los 16 ministerios que tenía el gobierno de Rafael Caldera, el nuevo gobierno decidió reducirlo a 14 para hacer un exceso a la burocracia. Fusionó Relaciones Interiores con Justicia, Trabajo con Familia, Transporte y Comunicaciones con Mindur y eliminó Agricultura.
Esa situación no duro mucho. Rápidamente y sin mayores explicaciones se fueron creando nuevos ministerios: Ciencia, Educación Universitaria, Pueblos Indígenas, Mujer e Igualdad de Género, Deporte y Comunas, entre otros.
Igualmente ante cada crisis acontecida en el país se fueron creando otros para atender esos problemas, allí surgieron Alimentación (2004), Energía Eléctrica (2009) y Reconstrucción Urbana de Caracas (2011). Además de las denominadas Misiones, las Grandes Misiones y hasta entidades especiales como “Estado Mayor de Invierno”, para atender a los damnificados por las lluvias, o el “Estado Mayor Eléctrico” para hacerle frente a la crisis en ese sector.
Si le agregamos que la mayoría de los encargados en esos ministerios no cumplen con los requisitos para atender dichas soluciones.
Se calcula que en doce años de gestión, Chávez ha tenido en su tren ejecutivo a 125 ministros distintos, contando ministros en varios cargos.
Cuál será el aporte de este nuevo ministerio, pronto lo sabremos, por lo pronto la sesiones del Consejo de Ministro se agiganta como su enorme mesón donde todos escuchan las directrices del Presidente Chávez.
@Adonisalejandro
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